Deben respetarse los derechos humanos de los migrantes; gravar las remesas violentaría acuerdos: Fernández Noroña

El presidente del Senado de la República, Gerardo Fernández Noroña, indicó que las remesas son el ingreso más importante para México desde el exterior, por lo que, aunque el gobierno de Estados Unidos puede tomar las medidas que considere convenientes, “nosotros planteamos con mucha claridad que se deben respetar los derechos humanos y la dignidad de nuestros hermanos y hermanas migrantes”.

Al participar en el foro “Conectando Fronteras. La Importancia Económica de las Remesas Familiares”, el legislador expresó su preocupación por lo que sucede en Estados Unidos, en donde la Cámara de Senadores discutirá respecto al gravamen de 3.5 por ciento que se pretende aplicar a las transferencias de dinero de los migrantes.

Las y los migrantes, dijo, han ido en búsqueda de una oportunidad y no están extendiendo la mano, sino que con su trabajo y esfuerzo construyen la riqueza, aportan y pagan impuestos en el país vecino. “La carga tributaria a las remesas implicaría violentar un acuerdo que prohíbe la doble tributación”, subrayó.

Señaló que no pocos mexicanos avecindados en Estados Unidos han creado empresas, han generado recursos importantes y, ante esta situación, tener a salvo el trabajo de su vida y sus ahorros es muy relevante. “Les decimos que no están solos y que siempre estaremos alzando la voz y con todo nuestro compromiso para que su dignidad como seres humanos y sus derechos fundamentales sean respetados”, precisó.

A su vez, la secretaria de la Comisión de Asuntos Migratorios, senadora Karina Isabel Ruiz Ruiz, aseveró que el impuesto a las remesas no alcanzará el objetivo que el gobierno estadounidense pretende, que consiste en desincentivar la migración; por el contrario, provocará que más centroamericanos tengan la necesidad de migrar regularmente, porque el dinero no les alcanzará debido a la aplicación de ese gravamen.

Precisó que en la última reunión con congresistas de Estados Unidos propuso diseñar una reforma migratoria con el objetivo de integrar a esas personas a un esquema de economía formal, dado que las deportaciones cuestan dinero, pero una reforma de esa naturaleza generaría ingresos a ese país.

En su turno, Rogelio Mauricio Rivero Márquez, titular de la Unidad de la Banca de Desarrollo de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, se refirió a la relevancia de las remesas, a su contribución en la economía de las familias mexicanas, sobre todo de quienes viven en zonas rurales. “Por ello, desde la secretaría promovemos acciones para que esos recursos lleguen de forma segura, rápida y a los menores costos posibles”, puntualizó.

Por su parte, Rocío Mejía Flores, directora general de la Financiera para el Bienestar, resaltó que México es el segundo receptor de remesas en el mundo, por lo que “nos sumamos a la exigencia de que se respete a las y los migrantes en Estados Unidos, a sus familias y a las y los trabajadores que con su esfuerzo aportan millones de dólares a la economía del vecino país”.

En su oportunidad, Jenaro Villamil Rodríguez, encargado de despacho de la presidencia del Sistema Público de Radiodifusión del Estado Mexicano, estimó que “no son tiempos fáciles para las y los migrantes, porque hay un sector que los ve como un ejército invasor”. Añadió que las remesas son el cordón umbilical que une a las y los mexicanos en Estados Unidos con los que se encuentran en México, y es lo que quieren asfixiar con un impuesto.

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